24 marzo, 2010

Mundos de sal ( I )

He recogido el último cabo,
he amarrado los ojos al viento.
Queda mi cuerpo al pairo todavía
y una fragancia que hace muesca
en esta piel sin color,
sin patria, ni bandera.
He recogido el último cabo,
ahora la corriente me lleva

donde la sal no ahoge más almohadas.